Seba uno de los buenos

Barrilete tiene su propia historia, con buenas y malas, campeonatos y ascensos, malas campañas y victorias para el recuerdo. Pero Barrilete no es un sólo un nombre pegadizo, sino un conjunto de personas que intentan jugar al futbol lo mejor que se pueda dominados por el espíritu amateur y el compromiso que se asemeja a la profesionalidad de aquellos que viven del fútbol.

Dentro de ese grupo de jugadores que año tras año hacen mas grande nuetro gran amor hay un hombre que dejó una marca, un sello, una forma de sentir el fútbol. Seba Echeverría, el capitán, nos dice "hasta siempre" luego de una larga carrera en el fútbol de ciudad y un sólo color en el corazón, el verde.

El 2004 marcó el inicio de un sueño, ese sueño luego se convirtió en deseo y mas tarde en un proyecto. La pretemporada de económicas fue la sala de fundación. César, Santi, Juanma, Juanjo, Fede, Cone y él, el capitán de Eco. Dando vueltas al monumento Guemes, gran caudillo argentino que a través de su espíritu nos daba el visto bueno para arrancar la campaña.

Los Montes, el Chanchi, Barbani, Darío, Pato, Fuzer, Pablito y muchos más players completaban el primer batallón. Seba contaba con la personalidad y el nivel futbolístico para liderar la tropa de ese recordado primer campeonato. Barrilete pasó la primera ronda tranquilamente, pero al llegar a los cruces le costó, es mas, no pasó a la ronda final y aquel año marcó el primer sorprendente adiós del caudillo. Fede, Juanjo y él fueron convocados por la selección de la UBA, los dos primeros se quedaron en el equipo pero él asumió el desafio mayor y prefirió abandonar la verde sabiendo que no iba a poder estar al 100%. Las puertas quedaron abiertas.

En el medio estuvo la gran campaña del verde, Campeón de la D en 2005 y Campeón de la C en 2006 con Marce y Cachín como Dts, respectivamente. Seba ya había abandonado la UBA y tenía ganas de volver en 2007, pero las mismas diferencias del principio y algunas idas y venidas no le permitieron el regreso. El flamante Deoportivo Pasto, fundado por J.M. Arguelles, lo supo cobijar y volvió a la capitanía. Luego de hacer una extraordinaria campaña en función de las posibilidades del equipo, su regreso a Barrilete ya era un hecho.

2008 fue el año de la Dupla Nefasta, Fede Prado y el Negro Espeleta llegaban al banco con ganas de devolverle la gloria a un equipo desgastado. La vuelta de Seba fue un aliciente para todo el plantel, el equipo mostraba un gran nivel en sus jugadores (la gran mayoría venía de hacer una de las mejores campañas de la historia de económicas en el subcampeonato del 2007) y los "nefastos" iban por el campeonato de la B.

Los primeros partidos fueron durísimos, tal es así que Seba terminó algunos jugando de central a causa de algunas expulsiones y así fue como llegó su segunda pero forzada salida del equipo. La batalla de garranda lo dejó sin una pierna tras jugarse la vida para evitar el empate. Barrilete ganó los tres puntos pero perdió mucho mas. Seba tuvo que ser intervenido para que le reconstruyan parte del peroné, la tibia y el tobillo. Mas allá del optimismo de sus compañeros, el ya vislumbraba el retiro y, conociendo su tosudez, nadie se atrevía a contradecir sus augurios.

La Dupla Nefasta no aguantó la presión de otra mala campaña y en la última fecha se despidió de sus jugadores que quedaron sorprendidos ya que a pesar de los malos resultados, la mayoría del plantel pensaba en renovarle la confianza para el próximo año. Sebastián Cambiasso, el Gato, se hizo cargo del equipo en un momento mas que difìcil. Mientras, Seba se acercaba con muletas a ver los partidos de sus grandes amores: Económicas y Barrilete.

La lesión no sólo le impidió vestir la verde, sino que lo retiró de la Selección de Económicas justo en el año donde aquel grupo de perseverantes logró el tan ansiado campeonato. Ya para ese entonces, todos sabíamos que la sed de revancha dominaba su corazón y el Gato, junto a Santi Cremona, comenzaron la operación retorno. Ese 2009 fue el año en que volvió a pisar el cesped con la verde en el pecho. Promediando el año, Gatao mandó a la cancha a su as de espadas en la 5ta Fecha vs Amenaza de Bomba. Seba seguía jugando a muerte aunque aún el físico le jugaba una mala pasada ya que debía realizar una buena pretemporada para retomar la confianza y el estado físico.

Ya en 2010, llegó el mejor momento del gran capitán. El equipo hizo una gran campaña y logró el asceno a la categoría A. Fue caudillo de la defensa y asumió la responsabilidad de patear los penales, nunca falló. El llanto del Gato al final de la campaña tuvo un abrazo interminable con el alma del equipo. La confianza recíproca fue factor fundamental para esa gran campaña. Ambos están agradecidos, el uno al otro.

La categoría A siempre fun un anhelo de todo el equipo, mas allá de los proyectos de vida personales, nadie se iba a perder la posibilidad de jugarla. El Gato, desgastado, prefirió alejarse del equipo y el primer Triunvirato de Barrilete tomó las riendas del equipo. Seba, desconfiando del proyecto, no se mostró enganchado en los primeros partidos. Menos cuando le pideron que juegue de central ante la falta de jugadores y de caudillo que había en ese puesto. Mas allá de las diferencias del principio y la línea de tres. Seba siempre dejó el 100%  por la verde.

El campeonato arrancó con muchas dudas pero sin derrotas, la defensa se iba convirtiendo el el pilar fundamental de otra muy buena campaña. Barrilete terminó peleando el ascenso hasta el final y terminó con la valla menos vencida del torneo, ganando el clásico frente a Costa Rica y siendo el único equipo de la categoría que le ganó a un gran campeón como lo fue Def. de Viedma.

El 2012 sí será el año del adiós, pero por suerte será desde dentro de la cancha en algunos partidos, ya que Seba aceptó formar parte de la lista de 25 para ofrecerle su mano y su corazón (una vez mas) siempre que el equipo lo necesite. También es un notición saber que viene al mundo otro patadura de corazón gigante que ojalá pueda juntarse con el pequeño Gez y el pequeño Puchito para continuar la dinastía de campeones.

Se va uno de los buenos, Seba un de los mejores.

C8